Durante el verano, la piscina nos proporciona una escapatoria muy satisfactoria y agradable para contrarrestar el calor que los meses traen consigo. ¿Y qué pasa cuando llega el otoño y el invierno? En Limpieza y mantenimiento Limar vamos a hablar sobre los mejores consejos para mantener una piscina en invierno en perfecto estado.
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La piscina como elemento de disfrute y lujo es increíble por su versatilidad, atractivo e índice de diversión durante los meses de primavera y verano. Sin bien en estos meses es importante hacerle mantenimiento para mantener el agua cristalina, poco se habla del cuidado que debe de hacerse durante los meses de otoño e invierno.
Mantener una piscina en invierno es sumamente importante porque ayuda a ahorrar en costes a final de año. No se trata solo de vaciar el agua, todo lo contrario, se busca preservarla de la mejor forma posible para así no dañar la integridad de la estructura.
Hay también quienes consideran que mantener una piscina en invierno es realmente el momento clave en la preservación de estas. Para ello, vamos a hablar sobre 6 consejos para invernar piscinas.
El agua es una pieza fundamental a la hora de mantener una piscina ya que esta ejerce peso y presión de manera balanceada sobre el fondo y los azulejos de las paredes, haciendo que estos queden fijos en todo momento y no se deformen o se muevan por más fijados que hayan estado anteriormente.
Se tiene que tomar en cuenta además que la cantidad de agua que se necesita para poder llenar de manera eficiente una piscina es de al menos 28.000 litros, lo cual puede ser muy caro de reponer pasado los meses invernales.
Además, conservar el agua ayuda a cuidar el medio ambiente ya que esta debe ser tratada de manera constante por químicos que buscan cuidar la apariencia de ella en todo momento. Liberar el agua de una piscina significa verter cientos de litros químicos que pueden afectar los ecosistemas de ríos y mares del planeta.
Una de las mejores maneras de cuidar una piscina es a través del filtro que esta tiene. Mediante este aparato se puede filtrar todo tipo de impurezas y basuras que el ojo no ve a simple vista, ayudando en todo momento a mantener su color y su aspecto.
Durante estos meses fríos es importante encenderlo durante unas 6 horas para filtrar cualquier partícula de tierra, de polvo o de microorganismos que se hayan formado en el agua de la piscina.
Recuerda además vigilar que el filtro esté en óptimas condiciones para ejecutar esta labor. Es usual que cada 15 días necesite una limpieza, aunque algunos incluyen un medidor para verificar el estado en el que se encuentran.
A pesar de no estar en uso, la constante exposición al aire hace que se creen algunas bacterias y algas que terminan por asentarse en las paredes y pisos de nuestras piscinas, haciendo que estas tomen un color verduzco nada agradable.
De no trabajar este problema a tiempo, se corre el riesgo de tener el agua completamente contaminada y sería necesario vaciar la piscina por completo para limpiarla a fondo.
Cepillar las paredes y pisos es la manera más práctica y económica de evitar que esto suceda- Lo más recomendable es que esto se haga al menos una vez a la semana por toda la superficie, tanto aquellas que estén sumergidas en el agua como aquellas que no, como los bordes, por ejemplo.
El balance químico es una parte fundamental al momento de mantener una piscina en invierno. Con la llegada de las temperaturas bajas, es común que se cause un desequilibrio entre el oxígeno y el nitrógeno, lo que le da espacio a que las algas puedan crecer sin restricciones.
Para ello se utilizan diversos productos químicos que regularizan su nivel de manera efectiva. Dependiendo de si el agua se encuentra en un estado alcalino o ácido, se debe aplicar el químico correspondiente para equilibrar su composición y así mantener cristalino el agua de la piscina.
La mayoría de los dueños suelen pensar que una cubierta puede ser un capricho, sin embargo, esto se aleja bastante de la realidad.
La cubierta, como podrás imaginar, impide que elementos como el aire, polvo, tierra, hojas e insectos entren en contacto con la superficie del agua, haciendo que esta sea más fácil de mantener a largo plazo. Además, en los meses fríos, la cubierta funciona como una lona que mantiene la temperatura del agua unos grados por encima del clima atmosférico.
El no usar una cubierta significa pasar una mayor cantidad de tiempo trabajando en el cuidado de la piscina.
Durante los meses de invierno, es imposible evitar que el agua de la piscina termine congelándose. Esto puede ser un problema ya que podría dañar los azulejos y desagües de tu piscina si está al máximo de su capacidad.
Para evitar este problema, lo mejor es vaciar de manera parcial la piscina para aliviar un poco el peso extra que pueda generar el hielo. Además, así se evita que se tapen las salidas de las cañerías superiores, al mismo tiempo que permiten hacer una limpieza a fondo de estas.
El mantenimiento de piscinas en invierno puede ser a veces un trabajo de todo un día. En Limpiezas Limar conocemos bien que tienes una agenda apretada y por eso ofrecemos nuestros servicios a domicilio.
No importa si se trata de una piscina o si se trata de arreglar tu jardín. En Limpiezas Limar estamos preparados para trabajar en cualquier situación que se te presente sin importar el clima o la hora que necesites.
Ponte en contacto con nosotros a través del +34 91 502 82 66 o mediante nuestro correo electrónico:info@limpiezaymantenimiento.es donde podrás aclarar todas tus dudas y conocer más a fondo nuestros servicios.
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